sábado, 27 de marzo de 2010

19-03-10. Salida a Cuacos de Yuste y Valle del Jerte












19-03-10. Salida a Cuacos de Yuste y Valle del Jerte
Participantes:
Jóvenes del grupo Shalom y padre Víctor, nuestro querido cura

Hacía tiempo que no escribía crónicas, ya sea por embotamiento, apatía, o especialmente por pereza, llamadlo como queráis. La cuestión es que estoy haciendo un esfuerzo titánico para ponerme otra vez las pilas... Pero merece la pena, ya que semejante excursión bien vale al menos tres páginas resumidas en una... ¡¡fue un día completo y estupendo!!

Los jóvenes de Shalom, Jorge, Rubén, Silvia, Gema, Mari Ángeles, María, Oscar, Elvira, y el que suscribe (Miguel) más nuestro reverendo cura Víctor quedamos un día de San José a las 9:30 de la mañana en la parroquia para una jornada que prometía larga. Entre todos nos repartimos en la fregoneta del cura y el coche de María... y los conductores pusieron el morro de los vehículos hacia Extremadura.

Pero no tomamos el camino oficial, o sea, la Nacional V. Sólo un pequeño tramo de ésta para luego tomar en Alcorcón la M-501 y así recorrer tierras abulenses del Valle del Tiétar y entrar en Cáceres por la preciosa comarca de La Vera, cuyos pueblos dan nombre a calles de nuestro barrio de San Ignacio.

La primera parada, quitando las retenciones de San Martín de Valdeiglesias, la hicimos en Arenas de San Pedro, en pleno Valle del Tiétar y al pie de Gredos. Visita al Santuario de San Pedro de Alcántara, primeras fotos y el primer cafetito caliente en el pueblo. Y continuación hacia Cuacos de Yuste, transitando por una carretera repleta de curvas y bosques frondosos, nada más salir de Arenas...

Tras dejar atrás Candeleda, el último pueblo de Ávila, el siguiente, Madrigal de la Vera, nos da la bienvenida a la Alta Extremadura, Cáceres, y por tanto, a La Vera. Al poco de pasar Jarandilla, Aldeanueva, Valverde y Losar, llegamos a Cuacos de Yuste, en cuyo monasterio acabó sus días Carlos V el emperador. Visita al monasterio, aunque yo me quedé fuera, y después, salida hacia el pueblo donde llenaríamos el estómago, Garganta La Olla, encajado precisamente en una garganta entre montañas.

Desde luego, el entorno natural de estos lugares es único, hay que verlo, vivirlo y sobre todo respetarlo, que es una maravilla irrepetible lo que tenemos. Cantidad de fotos. Y por fin a llenar el buche, en la terraza de un bar en la plazuela de entrada al pueblo. Poco después visita turística por el casco histórico y el segundo café caliente en una cantina de la plaza del Ayuntamiento. Más fotos...

Desde aquí nos encaminamos hacia el formidable e inmenso Valle del Jerte (destaca en las fotografías satélite de España en Google Maps), no sin antes pasar por espectacular puerto del Piornal, que con sus tremendos desniveles y curvas infinitas une La Vera y el susodicho Valle. Y la carretera, muy estrecha y mala en algunos tramos, acaba desembocando en la Nacional 110, que regresa a Ávila.

Por fin, en el fondo del Valle y con el río Jerte en paralelo, tomamos la Nacional 110, pasando por Navaconcejo, Cabezuela, Tornavacas y el puerto que da nombre a este último pueblo y que es frontera natural entre Extremadura y la Castilla de arriba. Volvemos a Ávila, y por tanto, a Madrid. Eso sí, haciendo una última parada en El Barco de Ávila, pueblo de nuestro amigo shalomero Marce y escenario de su boda con Mónica, como recordaréis hace casi dos años, y nuestra estancia en la finca “Ambiciones” y lo bien que lo pasamos... JEJE

Último cafetito y vuelta a la capital del reino pasando por Ávila ciudad y tomando la Nacional VI en Villacastín. Fin de esta nuestra fabulosa excursión y que se repitan muuuuchas más. Son las 11 de la noche.

Un abrazo a tod@s. Por mi parte me lo he pasao genial JEJE...

Miguel