Sí, ya sé que canto como unos zorros, lo reconozco. Y encima no me gustan las expresiones que pongo: me dijo mi madre que parezco Steve Wonder al cantar con la boca torcida. Pero si encontrara una voz femenina y cristalina, otro gallo cantaría, valga la redundancia. Bueno, en este caso sería una gallina... ¡Je, je! Pero bueno, cuando cante, tapaos los oídos. A veces hay que saber reírse de uno mismo, tener sentido del humor y hacer un poco el payaso. Porque los payasos son gente honrada y muy profesional que se ganan la vida haciendo reír a los demás. Un insulto para ellos sería llamar payaso a un político corrupto, porque éste no es más que un ladrón de guante blanco, que no hace reír a nadie... Pero en esos temas no quiero entrar. Que la futura voz femenina que encuentre, si Dios quiere, para formar dúo, no se ofenda por lo de gallina. Es un dicho popular. ¡Ana Torroja, cuanto te echo de menos, guapa! En esta ocasión me ha dado por Mecano, interpretando 2 temas: El primero, "Quédate en Madrid", del álbum "Descanso dominical", poniendo mi voz de cazallero. No se puede interpretar la canción enteramente con la guitarra, hay que rellenarla. El segundo y archiconocido "Hijo de la luna", perteneciente al álbum "Entre el cielo y el suelo" ya es harina de otro costal, enteramente instrumental, guitarra y sólo guitarra. Espero que os guste. Un abrazo. Miguel
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